Los Warriors resienten la ausencia de Curry y Minnesota empata la serie a un triunfo por bando

Golden State resiente la ausencia de su gran figura y terminan cayendo ante los Timberwolves

• ¿Quién pasa los partidos de los Playoffs NBA?
• Resultados de la primera ronda de los Playoffs NBA
• ¿Cómo le ha ido a los Warriors sin Stephen Curry?

Sin Stephen Curry en la cancha, los Golden State Warriors fueron una sombra de sí mismos ante unos Timberwolves que no perdonaron. La ausencia del astro, marginado por una distensión en el tendón de la corva izquierdo, pesó como una losa en el segundo juego de esta serie. Julius Randle tomó el protagonismo con una actuación estelar: 24 puntos y 11 asistencias que guiaron a Minnesota a una cómoda victoria por 117-93, empatando la serie 1-1 y enviando un claro mensaje de fortaleza colectiva.

Anthony Edwards añadió 20 puntos y encendió las alarmas brevemente tras una caída que lo hizo salir momentáneamente del partido, pero regresó sin problemas. Los Wolves corrigieron uno de sus mayores pecados del primer encuentro: su puntería desde el perímetro. Triplicaron sus aciertos en triples con 16 de 37 intentos, castigando a unos Warriors desorientados y carentes de liderazgo ofensivo. La defensa también fue un pilar, ahogando a los tiradores rivales y reduciendo sus opciones en cada posesión.

Golden State tardó casi cinco minutos en anotar su primera canasta, un triple de Jimmy Butler que apenas maquilló un arranque demoledor de Minnesota. Los dirigidos por Steve Kerr, que improvisaron sin su principal referencia ofensiva, no lograron encontrar ritmo. Kerr usó hasta 14 jugadores, 12 de ellos en los primeros 14 minutos, en una búsqueda desesperada de respuestas que nunca llegaron.

Jonathan Kuminga (18 puntos) y Trayce Jackson-Davis (15) fueron los únicos que ofrecieron resistencia, combinándose para encestar 14 de 17 tiros. Sin embargo, sin Curry para atraer marcas y distribuir el juego, el ataque de Golden State careció de profundidad. Kuminga brilló, sí, pero no tuvo la compañía necesaria para sostener al equipo. Los Wolves supieron explotar cada desajuste y mostraron una defensa física e inteligente.

La frustración fue evidente en la banca de los Warriors. Draymond Green protagonizó un momento tenso al recibir su quinta falta técnica en estos playoffs, rozando la suspensión automática. Su codazo a Naz Reid desató una reacción que lo llevó a gritarle al árbitro Tony Brothers durante un tiempo muerto. Curry, desde el banco, intentó calmar los ánimos y evitar una expulsión que hubiera complicado aún más la situación.

El primer cuarto fue una pesadilla para los de San Francisco, con apenas 15 puntos anotados, su peor registro en playoffs desde 2016. La dependencia de Curry quedó al desnudo. Mientras se espera su posible regreso la próxima semana, Golden State deberá encontrar respuestas internas si quiere seguir con vida en la serie. Por ahora, Minnesota ha tomado el control emocional y táctico, demostrando que sin Curry, los Warriors pierden mucho más que a su máximo anotador. ¿Podrán reinventarse antes del Juego 3?

Te puede interesar: