El fracaso de Fernando Gago, la confirmación de dos décadas de declive de Boca Juniors

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Fernando Gago dejará de ser entrenador de Boca Juniors tras la eliminación en la Copa Libertadores ante Alianza Lima. Salvo un giro de acontecimientos, el anuncio de su despido llegará en las próximas horas. Esta situación alarga la crisis de un gigante de Sudamérica, que no ha rendido como se esperaba desde hace casi dos décadas. 

Gago llegó a Boca en octubre de 2024 después de una tumultuosa salida de las Chivas, con la ilusión de devolverle la gloria a un equipo que, aunque sigue siendo gigante en tradición, sus resultados actuales no corresponden a su historia. Sin embargo, su gestión fue un reflejo de los altibajos que marcaron su paso por Guadalajara. En Chivas, el argentino generó expectativas con un arranque prometedor en el Apertura 2024. No obstante, su marcha repentina rumbo al conjunto xeneize, ejecutando una cláusula de rescisión tras negar contactos con el club, dejó una impresión negativa. 

En Boca Juniors, la eliminación en la ronda previa de la Libertadores no es una cuestión menor. Desde su último título internacional en 2007, el club ha acumulado decepciones. Finales perdidas, eliminaciones inesperadas y una inconsistencia que lo aleja de su época dorada. Un eco de lo que se vive en Chivas y del propio paso de Gago por el Rebaño Sagrado, donde las oportunidades también se esfumaron entre lesiones y decisiones cuestionables.

Una crisis que no termina

Este traspié se suma a una lista dolorosa: la final perdida en 2012 ante Corinthians, el histórico batacazo de 2018 frente a River Plate en Madrid, y otras derrotas inesperadas que han puesto en duda la mística xeneize. Bajo el mando de Gago, el club no ha logrado encontrar respuestas, y se reafirma un declive que va desde la directiva hasta el terreno de juego.

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